Altos funcionarios venezolanos acusaron al senador Marco Rubio y a la CIA de planear el derrocamiento del gobierno del presidente Nicolás Maduro.
En momentos que Venezuela desciende en el caso, el ministro de Relaciones Exteriores, Samuel Moncada, y Carlos Ron, encargado de negocios de la embajada de Venezuela en Washington, acusaron a Rubio y al director de la CIA, Mike Pompeo, de confabularse en secreto contra Caracas para que Washington pueda colocar nuevos líderes afines a los intereses estadounidenses.
“Lo que este grupo está tratando de hacer con Venezuela es dividir al gobierno, reconocer a otros líderes y fomentar un conflicto con los venezolanos”, dijo Ron el martes a un grupo de reporteros en Washington. “Esto es absolutamente inaceptable”.
Venezuela, país sudamericano con las mayores reservas de petróleo del mundo, está inmerso en un caos fuera de control, su economía se ha desplomado y la población pasa hambre en momentos que los ingresos petroleros han bajado significativamente. Las tensiones se dispararon esta semana de cara antes una convocatoria a una Asamblea Constituyente, programada para el 30 de julio, para modificar la Constitución. El gobierno venezolano alega que el cambio es necesario para estabilizar el país, pero Estados Unidos lo considera un intento de implantar una “dictadura”.
